crónica de castas

Leo el blog de Julio el sueco en dónde confieza su desprecio absoluto por la clase media, y aunque entiendo su descontento, no lo comparto.

Creo que ser un hijodeputa no tiene nada que ver con la clase social. He conocido hijosdeputa que trabajan en una maquiladora ganando el sueldo mínimo y he conocido hijosdeputa que manejan un Mercedez Benz. Yo nací en una familia que podría ser considerada una familia clase-mediera (mamá enfermera y papá pequeño-empresario), pero no es éste post una apología de la clase media, en la que por azares del destino, en los que nada tuve yo que ver, nací.
Yo no respondo por nadie, sino por mi mismo.
Entre los 18 y los 20 años trabajé en una maquiladora sirviendo de comer a los otros empleados y allí conocí a gente de la clase trabajadora que eran tan o más hijosdeputa como los directivos de la maquiladora misma.
Allí aprendí que la clase social nada tiene que ver con ser una "buena persona" o simplemente ser alguién que no sea gandalla y aprovechado de los demás y también aprendí que generalizar casi siempre termina siendo una gran estupidez.
Generalizar es dar un escupitajo al cielo volteando para arriba.

La mayoría de los que se quejan de la clase media son gente de clase media, ya que casi siempre, son los únicos que tienen tiempo de relexionar sobre esas situaciones de vida. La clase baja, regularmente, está más preocupada por comer y satisfacer algunas necesidades más básicas que las de criticar a la llamada "pequeña burguesía".

Conozco personas a las que respeto de sobremanera en todas y cada una de las clases sociales, inclusive en la denostada clase media.
Vivir con resentimientos de clase es una cerrazón mental que juzga antes de conocer. Es una variación del racismo.

Trabajando en la maquiladora aprendí que no exite una clase social "buena" o "mala", "digna" o "indigna", "maravillosa" o "hijadeputa". En cuestión de clases sociales, nada existe per sé, nada es apriori. Ser un hijodeputa es cuestión de aprendizaje no de clase.
Mejor hablemos de personas...

PS: y sí, yo también he conocido grandes hijosdeputa de clase media.