conciertos y huracanes


Buen concierto el pasado fin de semana. Tuvimos la oportunidad de platicar con director de cine francés, Jean Pierre Gorín y nos invitó participar musicalmente en el festival de Cine Ficco en Ciudad de México. Será un honor.

En Octubre del 2005 fuimos a la premiación de los MTV Awards en Playa del Carmen, mismos que fueron cancelados debido a la amenaza de huracán. Yo decidí no regresarme, por motivos que no vale la pena recordar, pero me quedé en Playa del Carmen esperando estoicamente. El saldo fue: seis días incomunicado de la civilización, sin acceso carretero, sin teléfono, sin internet, sin noticias y con una gran ansiedad. El huracán Wilma ha sido el más intenso que se haya tenido registrado, con vientos que alcanzaron los 260 km por hora. Las palmeras que no salieron volando de tajo, el viento las inclinaba a 45 grados. Todo era inundación y yo sólo pasaba las horas esperanzado a que la ventana de mi habitación no reventara, porque habría muy poco que hacer en dado caso que eso sucediera. Los colchones de la cama los coloqué recargados en la ventana, por si acaso sucedía lo peor, por lo menos no morir a consecuencia de los pedazos de vidrio lanzados por el viento.
Una de esas noches fue terrible, al grado de pasarla acostado en el baño pensando en la fragilidad de la vida. Después, a pesar de estar incomunicado, vino la calma.
Sólo restaba: esperar, esperar y esperar. Disfrutar, en la manera de lo posible, de la hermosa playa que la ribiera maya ofrecía y ordenar algunas cervezas para el susto. Cada dos horas preguntaba si el acceso carretero ya era posible y si había noticias de la reanudación de vuelos desde Cancún. Así pasé los últimos cuatro días.
Debo confesar, que por extraño que parezca, no todo fue tragedia. En una cena con vino tinto para celebrar la sobrevivencia, prometí volver el próximo año, osea en este 2006, y el Destino me ha concedido tal deseo.
El 31 de Diciembre estaré dando un concierto en Playa del Carmen. Así que a un año después de sobrevivir a Wilma, volveré, tal y como lo prometí aquella noche.
Si andan por allá, nos vemos y celebramos la llegada del 2007 con tarolazos digitalizados...