jueves, julio 01, 2004

música contemporánea





Pocas veces ha llegado a buen fin, la mezcla entre instrumentos orquestales y música electrónica. Regulamente el resultado de dicha mezcla, suele componerse de clichés aburridos, predecibles y muy poco aventurados en cuanto a expresión sónica se refiere.

Hace un par de semanas compré un disco de la colección francesa, Signature. El ensable electro-acústico (por llamarlo de algún modo) firma con el nombre de Ligthwave y el disco se llama Bleue Comme Une Orange. Una exposición rica en texturas lentas y colores musicales llenos de vida.

trompetas + piano + clarinete + flauta + violines + cellos + sintetizadores y procesamiento electrónico. A veces funciona, aunque también es justo reconocer que este amasiato está muy joven aún y todavía faltan miles de cosas por hacer. Digamos que todavía le falta experimentar nuevas posiciones en la cama infinita de las posibilidades sonoras.



música para estar a solas con el mundo interior...

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