Schadenfreude: un sentimiento alemán
Asi como los portugueses tienen su saudade, un sentimiento intraducible litearlmente al español, el cual se encuentra instalado entre nostalgia y la melancolía. Los alemanes tienen su schadenfreude, que se podría traducir como ese perverso sentimiento de felicidad que da la desgracia de otros.
No puedo de dejar de sentir schadenfreude cuando veo caer a esos autodenominados líderes de la moral y de las buenas costumbres de la sociedad moderna, ejemplificados por personas como Martha Stewart en Estados Unidos y por Laura Bozzo en América (latina). Son dos ejemplos puntuales de seres que llegaron a sentirse modelos cuasiperfectos de la conducta y de las refinadas maneras, y no desperdiciaban oportunidad alguna para señalarnos a todos los demás (simples mortales de carne y hueso) la forma y el modo en que nos debíamos de comportar por ésta agitada vida moderna de lujuria y mal gusto.
Ahora que las veo tragando polvo, no puedo sino sentir ese perverso sentimiento de felicidad (alemana) que se llama: schadenfreude.
Soy un liberal que piensa que cada quién puede hacer con su vida y de su vida lo que le plazca, siempre y cuando no joda a los demás demasiado.
Sin embargo:
Schadenfreude por todos los sacerdotes pederastas que han ido apareciendo por televisión con cara de incredulidad y sorpresa, mientras les dictan su sentencia.
Schadenfreude cuando pasaban aquel video del cura mexicano en pleno arrebato pasional con su secretaria, que dicho sea de paso, fue una patética muestra de un espectáculo risible de aquel que nunca fue entrenado por la vida o por las mujeres en las ars amandi .
Una prueba más para abandonar la práctica del celibato por parte de la iglesia católica. Si no lo hacen por el amor de Dios, háganlo por todas esas pobres mujeres amantes de tantos sacerdotes alrededor del mundo, los cuales no han podido practicar libremente (como Dios mánda) las enseñanazas de Ovidio y mucho menos del Kamasutra.
Basta ver el video de marras para justificar plenamente mi petición.
Schadenfreude por los políticos conservadores sorpendidos en pleno "pecado" carnal con otras u otros que no son su venerada y abnegada esposa de la que tanto se hacían acompañar en sus campañas, discursos y fotografías oficiales.
Schadenfreude por aquellos políticos sorpendidos robando a diestra y siniestra, y que de pronto se encuentran tras la rejilla de los acusados rindiendo declaración judcial; señalados, regularmente, por otros de su misma calaña, pero en mejores condiciones políticas temporales.
Schadenfreude por todos esos que señalan con el dedo a los demás (nosotros) por los errores, hedonismos y nuestros pequeños excesos que hacen que ésta vida sea un poco más llevadera y menos aburrida.
Por todos éstos y algunos otros (que faltan): schadenfreude
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