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He leído con atención el más reciente cruce de palabras encendidas entre H. Yépez y Daniel Salinas.
Me parece que han argumentado bastante bien sus posturas ideológicas sobre la temática en cuestión (por lo menos se nota que han leído algo al respecto) y tambien, se han concedido licencia de ofenderse mutuamente, cosa que demerita un poco las argumentaciones de ambos, pero que no puedo negar, me ha provocado sendas carcajadas. El Chango, siempre presto a la provocación desaliñada, les ha hecho tercera, ofendiendo aún más a la persona y las palabras de H. Yépez.

Así van las cosas en éste supra-rancho, donde la mayoría somos seres híbridos (por utilizar una terminología moderna) con un poco de sangre española/árabe e indígena.

Yo soy de la opinión de que cualquier postura radical que proclame la superioridad del eurocentrismo sobre el indigenismo o al revés, es un poco como escupir hacia arriba...